Es posible que la causa haya sido el triunfo de la selección española de fútbol ante Alemania, pues resulta que la viñeta que publica ABC en su edición de papel no coincide con la que publica en su edición digital. Tal vez ya estaba la impresa la página cuando España consiguió el gol de la victoria y la dirección de ABC decidió cambiar la viñeta por esta otra alusiva al evento. En ella podemos encontrar a nuestro conocido filósofo de la antigüedad –el capitel de estilo jónico parece sugerir que de nacionalidad griega- leyendo una prensa que tiene como portada una que es común en todos los periódicos del día de hoy: el triunfo de España ante Alemania. Y por la reflexión que hace, parece que ha leído la gracieta del Sr. Rodríguez ZP en la rueda de prensa que ofreció en el Palacio de la Moncloa junto al presidente de Siria, Bachar al Asad, así como el discurso que pronunció ante los líderes europeos en la ceremonia de transmisión de la presidencia rotatoria al gobierno belga. En el primer caso, el Sr. Presidente fue preguntado por su opinión ante el importante partido que nuestra selección iba a jugar contra la todopoderosa Alemania, a lo que respondió: "Creo que nos hemos acercado bastante en cuanto al diferencial en relación con Alemania y creo y confío que vamos a superar ese diferencial el miércoles". Para aquellos que no están muy puestos en la materia, aclararemos que el término diferencial está en boca de todos los economistas e informadores de economía durante los últimos días al haberse disparado la diferencia entre la rentabilidad del bono español y el alemán y superar la barrera de los 200 puntos. En cuanto a la reunión con los líderes europeos, el Sr. Rodríguez ZP no tuvo ningún rubor en dar consejos a “troche y moche” sobre política exterior, política interior, economía, sociedad del bienestar, solidaridad entre los pueblos, etc., etc. Ni qué decir tiene la cara de sorpresa que pusieron los dirigentes europeos al sentirse aconsejados por aquél que ha llevado a su país a una crisis económica de proporciones desconocidas en varias décadas y a una crisis institucional de incierto futuro. Y como buen filósofo que es, al griego en cuestión no se le ocurre más que una conclusión: que la derrota de la selección alemana se ha producido por cometer la Sra. Merkel la imprudencia de seguir los consejos de su homólogo español.
Dejando de lado la crítica y el chascarrillo, nuestra enhorabuena a Vicente del Bosque y sus muchachos por lo bien que lo están haciendo. Aunque no se traigan la copa, ya son unos campeones.
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